Con un precio del barril Brent entre 102 y 103
dólares, cuando en 2012 costaba 106, con un cambio del euro en relación con la
moneda norteamericana prácticamente igual, ¿cuál es la razón de la subida de
los carburantes?, con un incremento del recibo de la luz que se calcula entre
un 1,5% y un 2,75%, más todos las otras medidas tomadas en el último Consejo de
Ministros de junio cómo la supresión de deducciones en el Impuesto de
Sociedades, lo que tenemos asegurado es un incremento de precios y una
contracción de la demanda.
No lo digo por los 83 céntimos por litro de alcohol,
salvó cerveza y vino, ni por los 10-15 céntimos del tabaco, es que los dos
aumentos de combustible y energético, más el incremento en el Impuesto de
Sociedades repercutirán directamente en los costes de producción y transporte
de cualquier producto, incluidos los básicos, con lo que vuelven a ser los
mismos los salen "perdiendo". Sin caer en la demagogia fácil
pregunto: ¿no hay otro modo de obtener el dinero que se precisa?¿no se decía
que con la reducción en la Administración ahorraríamos 50 millones de euros?,
¿acaso no es necesario que la inversión y el consumo se incrementen?, el mismo
ministro de Montoro cifra en 900 millones de euros lo que se puede recaudar,
aunque enseguida añade siempre que el consumo no se contraiga. Obviamente no
entiendo de economía y posiblemente me equivoco, pero para crecer es necesario
que el mercado se mueva, ¡ojalá éste sea el medio! los más entendidos lo dicen,
pero permitan que dude porque estas medidas, con diferentes nombres, se vienen
aplicando desde hace unos años y los parados y empresa en quiebra o fase
concursal siguen ahí.
Faltaba la guinda, y la tenemos en la llamada
"tasa ecológica" que habrá que pagar por los productos que contengan
gases fluorados de efecto invernadero, que se utilizaron en sustitución de los
clorofluorocarbonos (CFC) desde los años noventa del siglo pasado para cumplir
con el Protocolo de Kyoto sobre el Cambio Climático, el Parlamento Europeo los
acaba de prohibir porque también son dañinos con la capa de ozono, comenzaron a
usarse para sustituir a los CFC, se usan en aerosoles, refrigerantes (aires
acondicionados), extintores de incendios, disolventes y fabricación de espumas
aislantes. Otra solución innovadora y mucho mejor que no usar la corbata cuando
hace calor, además el Gobierno piensa recaudar 340 millones de euros al año, lo
que me preocupa es que durante 20 años se han utilizado sin ningún control,
ahora no se suprimen radicalmente cómo era de esperar al ser dañinos para
nuestro planeta, se cobra por utilizarlos quizás aplicándolo lo escrito por
Hegel "ten el valor de equivocarte".