viernes, 27 de marzo de 2015

Stop al cambio climático - Stop sign to the climate change

Desde el año 2000 estamos en el "hiato Climático" (el aumento global de temperatura de 0,8°C desde 1850 se detuvo) lo que trunca las previsiones realizadas sobre el Cambio Climático por los modelos del IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change) que se mantuvieron en las reuniones de Durban, Rio+20 y Nueva York, arguyendo que 18 años no son suficientes para obtener ninguna conclusión, incluso en Copenhague Ban Ki-Moon presentando la síntesis de la quinta Evaluación del Panel Intergubernamental del Cambio Climático dijo que "si continuamos como hasta ahora la oportunidad de mantener por debajo de 2ºC el aumento de temperatura para final de siglo se desvanecerá”, aunque añadió “La voz de los científicos debe guiar nuestros esfuerzos" luego no deberíamos desechar lo que está ocurriendo.


 
Si hacemos caso a Ban Ki-Moon sobre los científicos tendríamos que tener en cuenta los estudios sobre los glaciares en el mundo donde se comprueba que unos crecen y otros disminuyen sin  ninguna correlación con los gases de efecto invernadero, del mismo modo que la crisis y el inicio de la salida reflejada en el PIB han demostrado que la disminución o el aumento de los gases de efecto invernadero no han influido en el cambio de la temperatura global.

Científicos como Tung y Xianyao Chen (Universidad del Océano de China) explican lo que está sucediendo tras las observaciones en Océanos a 2.000m de profundidad: "Hay ciclos recurrentes que son impulsados por la salinidad que pueden almacenar calor en la profundidad del Atlántico y los océanos del Sur, así después de 30 años de rápido calentamiento, ahora es el momento de la fase de enfriamiento … Cuando llega el agua pesada a la parte superior de agua ligera, se sumerge muy rápidamente llevándose calor", añadiendo más elementos en los que los océanos y sus corrientes tienen influencia en el Cambio Climático descritos en otros estudios, todos estos datos, los de la expedición español Malaspina, y lo que he descrito en otros artículos presentan un futuro no apocalíptico, sabemos que hay soluciones que mantendrán el nivel de vida en Occidente, que también el resto pueda alcanzar nuestro nivel, y por supuesto confirma que el Planeta Azul tiene recursos para seguir dando vida.

domingo, 1 de marzo de 2015

Nada les hace cambiar - Nothing they makes change


Hemos llegado a unos momentos en los que es difícil escribir o hablar acorde a lo recomendado por las Academias de las lenguas Gallega, Española o cualquier otra que se hablé en la península, todo ello debido a que lo políticamente correcto se impone por encima incluso de la libertad de expresión, tan defendida por muchos de los que censura lo que no consideran correcto a las normas dictadas por un grupo. No soy ni lingüista, ni semiólogo, mi semántica y sintaxis dejan mucho que desear, ni cuando escribo de algo más cercano a mi formación científica y técnica, pero me llama la atención que personas con gran formación no sólo utilicen reiterativamente la definición masculina y femenina cuándo hablan o escriben, sino también el símbolo de la unidad de peso arroba @, que se popularizó cómo elemento integrante de los correos electrónicos.
 
No voy a negar que el idioma es machista, los conocedores del mismo lo dicen, lo que sí que me parece inadecuado es la utilización de esa "a" encerrada en un inicio de espiral (@) cómo símbolo simultáneo de "a" y "o" en determinadas palabras, simplemente a título de ejemplo pienso que no se aplicaría a: Deportista, atleta, astronauta, ciclista, futbolista, dentista, fisioterapeuta, pianista, violinista, flautista, motociclista, reservista, artista, taxista, electricista, alquimista, recepcionista, periodista, terrícola, cosmonauta, demócrata, socialista, comunista, fascista…. Aunque por las mismas razones tendríamos que usar la @ para indicar cuándo es una mujer o un hombre al escribir  gente,  pueblo o persona entre otras muchas.
 
No se puede cuestionar la igualdad entre hombre y mujeres, entre razas, entre religiones, pero sin malabarismos para que no digan que somos machistas, xenófobos o cualquier otro calificativo que políticamente no sea correcto. Ahora que lo conquistado tiene que seguir creciendo, y no retroceder cómo en algunas partes, debemos seguir luchando para conseguir la real igualdad en toda partes, que no se produzcan atrocidades, mutilaciones y todo tipo de vejaciones que estamos leyendo, oyendo e incluso viendo que suceden en muchas lugares del mundo.