martes, 5 de marzo de 2013

Tesoros del siglo XXI: Grafeno, Tántalo - Treasuries of the 21st century: Grafeno, Tantalum


Son abundante las noticias que aparecen en todos los medios sobre el grafeno -carbono con celdas de átomos similares al grafito-, incluso la UE ha destinado recursos para su estudio y aplicación durante los próximos 10 años en el programa FET (Future and Emerging Technologies). Es conocido desde hace más de 80 años pero sólo se logró aislar en el año 2004 por Kostya Novoselov y Andre Geim (por ello recibieron el Nobel de Física en 2010), lo mismo que otros descubrimientos, vino también de forma impensable y sencilla al pasar una cinta adhesiva sobre grafito. Es uno de los materiales producto de la nanotecnología más fino y flexible conocidos, siendo también gran conductor de eléctrico y térmico, y mucho más ligero, duro, flexible y fuerte que el acero. Utilizado en chips electrónicos integrados, células solares, y en sensores químicos y biológicos de ADN -característica de gran importancia pues detecta células cancerígenas-, cámaras de visión nocturnas, en transmisiones electrónicas a alta velocidad -Internet podrá alcanzar velocidades de gigabytes-, su flexibilidad y ligereza permitirá pantallas táctiles que se pueden enrollar, podrán construirse portátiles, tablets, teléfonos enrollables y transparentes, las baterías serán más ligeras y reciclables, con menor tiempo de carga que las actuales, y utilizado cómo adictivo en el combustible de los aviones les proporcionará mayor potencia y menor consumo.

Se está usando con algunas propiedades similares al tántalo ó tantalio -que se obtiene del coltán, abreviatura de columbita y tantalita- de gran dureza, maleable, dúctil, superconductor eléctrico y calorífico, muy buen condensador eléctrico, poco corrosivo, y que soporta temperaturas de 3.000ºC. Su utilización permitió abaratar los precios e incrementar las prestaciones de teléfonos móviles, smarphones, tablets, GPS, televisores de plasma, video juegos, equipos de música MP3 y MP4, instrumentos quirúrgicos, implantes médicos, sin olvidar el empleo en armas teledirigidas "inteligentes" y en la industria aeroespacial, donde la estación ISS es un ejemplo, es imprescindible para formar aleación con el acero en los oleoductos. El principal problema del grafeno es la producción industrial que de momento es escasa, España es pioneras en su producción aunque no para satisfacer una demanda industrial mundial.


Con el grafeno se pensó que el coltán llamado "oro del siglo XXI" iba a dejar paso al nuevo producto, hay muchas aplicaciones comunes y otras similares, de momento no va a ser el sustituto, las minas del Congo donde se encuentra el 80% seguirán explotándose, China firmó un contrato con la República Democrática del Congo en septiembre de 2007 para participar en la explotación en los próximos 30 años llevándose el 68% de la producción. En el Congo existen sólo 13 minas de coltan, de las que 12 están controladas por grupos armados militares y paramilitares, se encuentran  en las montañas del parque Nacional Kakuzi Biega, en Shabunda, Walikale, Mwenga, Kalehe… el mineral se extrae de manera artesanal en minas a cielo abierto con palas y barrenas en condiciones de trabajo precarias, muchos de ellos son niños. Es un país rico en otros materiales oro, diamantes,  casiterita (mineral del que se extrae el estaño utilizado en los oleoductos), y hasta petróleo.

Se ha encontrado coltán, aunque de momento en menor cantidad, en Australia, Canadá, Egipto, Sudáfrica, Nigeria Malasia, Tailandia, Brasil, Colombia, Venezuela ¿Selva amazónica?, incluso en Argentina lo han hallado en macizos de base granítica según confirmó el presidente de Gemera, (Camara Argentina de Empresas Mineras) Julio Ríos  "ya hay presencia comprobada del mineral en valles ubicados en las provincias de San Luis, Salta y Córdoba".

Occidente y sus empresas más punteras son las que utilizan el coltán en la fabricación de productos que tanto han cambiado nuestra forma de vida.

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