miércoles, 6 de enero de 2016

Cuántica y la eterna juventud - Quantum and the eternal youth

La revista "Nature Quant Information" publica un estudio que dice que con mucha probabilidad problemas hasta ahora irresolubles podrían tener solución con el ordenador cuántico (seguro), e incluyen un nuevo concepto "las curvas temporales abiertas" que permite los desplazamientos temporales con la condición de no tener ninguna acción directa con nada del pausado: así las partículas viajeras del tiempo nunca podrán interactuar consigo mismas, para ser exactos con los datos que contienen. Con este planteamiento el viaje en el tiempo podría producirse y se evitaría la "paradoja del abuelo" (al viajar al pasado mata antes de ser concebido su padre a su abuelo, con lo cual él no podría existir). 

Se convertiría en realidad el argumento de la eterna juventud que Óscar Wilde refleja "El retrato de Dorian Gray", que ya en la antigüedad había tratado Ovidio en la "Metamorfosis" y Paul Valery lo vuelve a retomar con el poema "Narciso habla". Más claro lo describe Goethe en "Fausto", podríamos encontrar una semejanza con la computadora cuántica de "las curvas temporales abiertas", actuando cómo tal Mefistófeles que le ofrece la eterna juventud a cambio de su alma y le hace firmar el documento con su propia sangre. 

De momento sólo se puede hablar de información, que es lo que un computador cuántico puede enviar, se comprobó recientemente que enviar información cuántica  a una distancia prudencia es real, no tele transportar objetos, el envío al pasado va en contra del principio cuántico de que el “alguien” dentro del sistema lo altera. La mayoría de los físicos no están de acuerdo con la nueva teoría de las curvas temporales abiertas  ya que nunca se ha recibido un mensaje ni nadie nos ha visitado del futuro, lo que la nueva teoría obvia, al tener cómo axioma que nunca puede llegar nada al ser la curva cuántica temporal cerrada en todo lo relacionado con lo que está por venir, todo mensaje del futuro es bloqueado. Esperemos que el computador cuántico no actúe como Mefistófeles que manipula a Fausto y nos depare sorpresas de viajes hacia el futuro y el pasado, entonces tendríamos que encontrar cómo en la novela “2001 A Space Odyssey” de Arthur C. Clarke (1968) a un David Bowman que puso su vida e riesgo al apagar a HAL.

No hay comentarios:

Publicar un comentario